Se puede definir a la Hipoacusia Inducida por Ruido (HIR) como la pérdida auditiva de tipo neurosensorial, de aparición progresiva, como resultado de la exposición a niveles perjudiciales de ruido. Se caracteriza por ser de comienzo insidioso, curso progresivo y de presentación predominantemente bilateral y simétrica. Comúnmente presenta una configuración audiométrica con muescas o escotoma (trauma acústico) con umbrales más bajos en 3, 4 o 6000Hz que a las frecuencias más graves (500, 1000 y 2000 Hz), recuperándose el umbral auditivo en la frecuencia 8000 Hz.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera la pérdida auditiva incapacitante cuando el umbral promedio de tonos puros es de 41 dB HL o inferior en las frecuencias 1000, 2000, 3000 y 4000 Hz. Refiere que alrededor de 1100 millones de jóvenes a nivel mundial pueden estar en riesgo de HIR debido a la exposición a música amplificada en bares, clubes y conciertos como así también el uso de auriculares personales a alta intensidad.
El gran número de personas en riesgo de HIR o que ya están afectadas por esta ha suscitado un gran interés en la investigación de medicamentos para prevenir la lesión del oído interno.
Hasta ahora los únicos métodos preventivos de la HIR en Argentina son:
Hace varios años que se busca alguna medicación que pueda ayudar en el tratamiento o prevención de las hipoacusias inducidas por ruido.
La Administración de Drogas y Alimentos de los EE. UU. (FDA) todavía no ha aprobado ningún medicamento para la prevención de la hipoacusia inducida por ruido, hay muchos ensayo clínicos.
Aunque el audiograma convencional (125 a 8000 Hz) con muescas o escotomas es la principal herramienta de diagnóstico clínico para la identificación de la hipoacusia inducida por ruido, no es la única prueba utilizada. La gran mayoría de los ensayos clínicos, utilizaron el audiograma como resultado primario. Los cambios en las otoemisiones acústicas por producto de distorsión (OEAPD), las otoemisiones acústicas evocadas transitorias (OEATE), suelen ser otra prueba para poder registrar esos cambios en el oído interno de los pacientes expuestos a ruido. Lamentablemente no se utilizan en forma rutinaria la audiometría de alta frecuencia (AAF), la audición en ruido, los potenciales evocados y una variedad de encuestas cualitativas de audición y tinnitus .
La literatura refiere que para poder hacer inferencias sobre la eficacia clínica relativa de diferentes fármacos otoprotectores, sería útil que los ensayos clínicos no solo compartan criterios de valoración comunes, sino que también utilicen definiciones comunes de lo que constituye un cambio clínicamente significativo dentro de cada uno de esos criterios de valoración principales y secundarios. Es decir poder «medir» cuánto mejora los estudios que se le realizan a ese paciente cuando se le administra un fármaco.
Los OAE se utilizan para las HIR en función de la vulnerabilidad de las célullas cicliadas externas a las lesiones por ruido. Se puede observar un cambio en la amplitud de las OEA antes de un cambio de umbral audiométrico medible.
El umbral de las OEAS se pueden medir de la misma manera que se determinan los umbrales audiométricos. Los niveles de estímulo se reducen sistemáticamente hasta que la OEA ya no se distingue del ruido de fondo. Se define como umbral la intensidad más baja donde se puede obtener una OEA confiable. Esto se puede realizar con otoemisores clínicos donde se pueden variar los parámetros que generalmente están «fijos» en aquellos aparatos que se utilizan para «screening auditivo».
Tanto las OEAS por producto de distorción (PD) como las Transitorias (T) proporcionan indicadores objetivos simples. La respuesta de (T) suele estar ausente en frecuencias en las que los umbrales de audición superan los 20–30 dB HL, mientras que las respuestas de (PD) se pueden registrar en pacientes con umbrales de hasta ~40 dB HL.
Varios estudios de investigación de hipoacusia inducida por ruido, han observado disminución en el umbral de AAF en ausencia de pérdida auditiva dentro del rango de frecuencia convencional. Por lo tanto, la AAF, de 9000 a 20000Hz, puede ser más sensible a las lesiones por ruido que la audiometría convencional hasta 8000 Hz.
Aún no está claro si las pruebas de audición en ruido pueden distinguir los déficits debidos a la muerte de las células ciliadas frente a los déficits debidos a patología neural (retrococlear) , pero las pruebas de audición en ruido parecen proporcionar una herramienta funcional convincente que es sensible al ruido. Se las denomina Logoaudiometría de SNR (signal Noise Radio), es decir el estímulo verbal y el ruido están en el mismo canal de evaluación. De esta manera bajos porcentajes de inteligibilidad en ruido, serían sospechosos de lesión coclear inducida por ruido.
En los últimos años ha aumentado el interés por el uso de los potenciales evocados en forma de electrococleografía o la medición de la respuesta auditiva del tronco encefálico (ABR), como herramientas para explorar los efectos del ruido en el oído interno. La amplitud de la onda I de PEA proporciona una visión amplia de la salud de las células ciliadas internas , la población de fibras del nervio auditivo y las sinapsis que conectan estas células con el nervio auditivo, todo lo cual debe estar intacto para que la onda I sea normal .
Hay numerosos cuestionarios que no detallaremos, algunos apuntan al esfuerzo auditivo percibido, al tinnitus, al vértigo,a la pérdida auditiva, a las quejas de los pacientes, etc. Por lo tanto, hay muchos que podrían incluirse en los protocolos para evaluar la HIR.
Probablemente los investigadores encuentren algún tipo de fármacos que ayude a prevenir o «frenar» la lesión de las células ciliadas externas, mientras tanto colega te pregunto: ¿En las evaluaciones auditivas conocidas como de «tipo laboral», estás incluyendo las OEAS y observando la ampitud de las mismas? ¿Estás incluyendo los PEA observado la curva I o solamente utilizas esta prueba cuando sospechas que es un paciente es un simulador? ¿Alguna vez evaluaste una logoaudiometria con ruido de fondo? ¿ Qué tan seguido has realizado una AAF? Si ya se, me vas a contestar : «No me las solicitan» . Creo que es hora de poder recibir a los pacientes que están expuestos a ruido con la posibilidad de elegir qué tipo de estudios elegimos hacer. ¿ Habrá quedado antiguo ya las 3 audiometrías con diferencia de una semana? . Me encantaría leer tu experiencia, dejame en los comentarios qué opinas. Gracias
Te dejo algunos arículos para que puedas profundizar
Prevención de la pérdida de audición inducida por ruido mediante el uso de medicamentos en investigación para el oído interno: los resultados de ensayos anteriores deberían informar el diseño de ensayos futuros
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC9221155/
Una visión general de la pérdida de audición inducida por el ruido ocupacional entre los trabajadores: epidemiología, patogenia y medidas preventivas
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC7603754/